26 de agosto: nace Julio Cortázar

Julio Cortázar nació el 26 de agosto de 1914, “producto del turismo y la diplomacia”, esto acaeció en Ixelles, Bélgica. No solo por la condición de funcionario en la embajada argentina de su padre, sino por la naturaleza de su obra, Cortázar es indudablemente un escritor nacional. Buena parte de la misma está signada por su infancia, transcurrida en Banfield, que daría la materia prima para numerosos cuentos de BestiarioFinal del Juego y otros. Ejerció como maestro normal y luego profesor en Letras, donde dejó entrever su interés por el surrealismo enseñando en sus clases al conde de Lautreamont y otros autores que no tenían todavía una fuerte inserción en el ámbito de las letras locales.

Las tareas de traducción, análisis literario y crítica cultural son ámbitos en los que Cortázar fue una presencia señera. Ejemplo de esto es su visionaria lectura del Adán Buenosayres de Leopoldo Marechal, maltratado por la crítica tras su aparición. Cortázar vio en esa novela “un acontecimiento extraordinario en las letras argentinas, y su diversa desmesura un signo merecedor de atención y expectativa”. Si bien, según su análisis, “el único gran fracaso de la obra es la ambición no cumplida de darle una superioridad que amalgamara las disímiles sustancias allí yuxtapuestas. No fue conseguido, y en verdad no importa demasiado”. Cortázar ve en la enormidad de la propuesta de Marechal un camino en el que las partes pueden funcionar en forma autónoma y en el que la linealidad queda a un costado, también consigue hacer entrar en la tradición de Mansilla y Payró a una obra que parecía no tener ascendencia clara.

Es notable que la novela más popular de Cortázar, Rayuela, tenga, también, esa lógica de las partes aparentemente azarosas que van en la búsqueda de un camino. Juan Filloy fue también rescatado por Cortázar, su influencia es declarada en distintos pasajes, principalmente en Rayuela: “(los franceses) no tienen ningún Juan Filloy que les escriba Caterva, ¿qué será de Filloy, che?”. El interés por los mendigos y otros marginales es también algo que puede rastrearse allí. Las traducciones de Cortázar de los cuentos completos del estadounidense Edgar Allan Poe son un punto en el que podemos reconocer la influencia en el género que más descolló: el relato breve. En la crítica cultural podemos destacar polémicas como las que mantuvo con el escritor colombiano Oscar Collazos acerca del rol del intelectual o sus lúcidas observaciones en la revista Paris Match acerca del espacio de la publicidad imperialista en el mismo medio que pide sus declaraciones contrarias a las dictaduras.

Si bien con el paso del tiempo la crítica más académica ha convertido a Cortázar en un autor reducible a la suma de sus procedimientos (basta leer una frase como “pescado enormísimo y tan no ella” o las infinitas referencias a casas chorizo para identificar los manierismos de la pluma del autor), es innegable lo que señala César Aira en su Diccionario de autores latinoamericanos: Cortázar es un autor iniciático para “los adolescentes que quieren ser escritores”, quienes “siempre lo van a seguir leyendo”. El cliché en Cortázar, sus lugares comunes, son sintomáticos también de una época, Rayuela siempre será la novela del boom latinoamericano por excelencia. Sus cuentos, por otro lado, han corrido mejor suerte. Borges reconoció inmediatamente su valía y tardó apenas unas pocas horas en publicar, en la revista Los Anales de Buenos Aires, su cuento “Casa tomada”.

Las novelas de Cortázar gustaron de los experimentos, no solo Rayuela, con su ir y venir de capítulos y su propuesta lúdica con el lector nos hacen juego con los procedimientos de las vanguardias. 62, modelo para armar amplifica un capítulo de Rayuela, e incluso obras como El libro de Manuel cruzan lo coyuntural y político con lo literario: Cortázar desarrolla su escritura según lo que sale en los diarios. En eso fue siempre un hombre de su tiempo, tomó la ciudadanía francesa para denunciar la dictadura militar argentina, estuvo siempre atento al destino latinoamericano, sabiendo que era el suyo.

Sus relatos breves siguen estremeciendo, hay un poder de síntesis inmenso y una maestría absoluta que puede apreciarse en piezas de menos de una carilla como “Continuidad de los parques” o en sus juegos de desdoblamiento que pueblan el imaginario de “Axolotl” o “La noche boca arriba”. Las historias de cronopios y famas, así como las instrucciones (para llorar, para dar cuerda a un reloj, para subir una escalera, etc.) siguen siendo siempre conmovedoramente divertidas.

Julio Cortázar nació y murió lejos de su patria. Falleció el 12 de febrero de 1984 en París, Francia y fue enterrado en el cementerio de Montparnasse junto a Baudelaire, Tristan Tzara y otros tantos autores que supo admirar y difundir. Sus grabaciones son, también, prueba del acento afrancesado que pulió con el tiempo. Sin embargo, basta escucharlo o leerlo para ver que siempre perteneció aquí y es una parte fundante de nuestras letras argentinas.

Día del Lector y la Lectora, en conmemoración y homenaje a Jorge Luis Borges

El 24 de agosto se conmemora el Día del Lector y la Lectora, en homenaje al nacimiento del escritor argentino Jorge Luis Borges, que cumpliría hoy 123 años.

Jorge Francisco Isidoro Luis Borges nació el 24 de agosto de 1899 en Buenos Aires. Hijo de Jorge Guillermo Borges y de Leonor Acevedo Suárez, compartió su pasión por la lectura con su hermana menor Norah. Desde pequeño Borges aprendió a leer en inglés antes que en español por influencia de su abuela paterna y su institutriz, ambas británicas, quienes se encargaron de su educación hasta que a los 9 años ingresó en la escuela primaria.

En 1914 se radicó con su familia en Europa, y regresó al país recién en 1921. Junto a un grupo de jóvenes tutelados por Macedonio Fernández, compañero de estudios de su padre y hasta entonces escritor inédito, fundó varias revistas, entre ellas Prisma y Proa. Junto a Ulises Petit de Murat dirigió la Revista Multicolor de los Sábados del diario Crítica.

En 1923 apareció su primer libro de poesía Fervor de Buenos Aires, una edición de 300 ejemplares, y tras su breve paso por Europa se instaló nuevamente en Buenos Aires donde conoció a Victoria Ocampo, con quien entabló una amistad.

En 1925 publicó su segundo libro de poesía Luna de enfrente y el primer ensayo Inquisiciones y junto a Silvina Ocampo y Adolfo Bioy Casares, Antología de la literatura fantástica (1940) y ordenó la Antología poética argentina (1941). También editó los cuentos El jardín de senderos que se bifurcan (1941) ; Seis problemas para don Isidro Parodi (1942) en colaboración con Adolfo Bioy Casares bajo el seudónimo de Honorio Bustos Domecq y Poemas (1922-1943). En 1944 publicó Ficciones incluyendo entre otros cuentos El jardín de senderos que se bifurcancon el que obtiene el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores.

Tiempo después aparece El compadrito (1945) una selección de poesía y prosa sobre el destino, los barrios y la música porteña en colaboración con Silvina Bullrich y funda la revista Anales de Buenos Aires. Luego da a conocer el ensayo Nueva refutación del tiempo que más adelante fue incluido en Otras inquisiciones (1952). Junto a Adolfo Bioy Casares tamibén edita la antología Prosa y verso de Quevedo (1948) y en forma independiente El Aleph (1949) una de sus obras más populares. Sus extensa bibliografía comprende cuentos como La muerte y la brújula (1951); El informe de Brodie (1970); El libro de arena (1975) y 25 de Agosto, 1983(1983); los poemas Cuaderno San Martín(1929); El hacedor (1960); Para las seis cuerdas(1967); El otro, el mismo (1969); Elogio de la sombra (1969); El oro de los tigres (1972); La rosa profunda (1975); Obra poética (1923-1976); La moneda de hierro (1976); Historia de la noche (1976); La cifra (1981) y Los conjurados (1985), y más de veinte ensayos, entre ellos El tamaño de mi esperanza (1926); El idioma de los argentinos (1928); Discusión(1932); Otras inquisiciones (1952); Obras completas (1960); El libro de los seres imaginarios (1968); Libro de sueños (1976) y Biblioteca personal (1986) entre otros.

El 1938, poco después de la muerte de su padre, Borges sufrió un accidente que le produjo una septicemia. A partir de ese momento su visión disminuyó y tuvo que depender de la ayuda de terceros para desenvolverse. En 1956 se le prohíbió leer y escribir por prescripción médica, y aprendió a componer sus textos de memoria para luego dictárserlos a sus allegadas.

El 21 de septiembre de 1967 Borges se casó por primera vez con Elsa Astete Millán y el matrimonio duró hasta 1970. El 8 de julio de 1975 falleció su madre a los noventa y nueve años. Y el 26 de abril se casó por segunda vez con María Kodama, compañera de estudios y colaboradora.

La obra de Borges trascendió tempranamente a nivel internacional y recibió reconocimientos como el Premio Formentor en Mallorca; el título de Commendatore del gobierno italiano y Comendador de la Orden de las Artes y las Letras por el gobierno francés; Comendador de la Orden del Sol en la ciudad de Lima; fue nombrado Miembro Honorario Extranjero de la Academia de Artes y Ciencias de los Estados Unidos; le otorgaron la insignia de Caballero (Sir) de la Orden del Imperio Británico y la medalla de oro del IX Premio de Poesía de Florencia (Italia); las insignias de la Orden del Mérito de la República Italiana y el grado de Gran Oficial en la Embajada de Buenos Airesl; le dieron as las llaves de la ciudad de Bogotá; la Orden al Mérito de la República Federal de Alemania; la Cruz del Halcón del gobierno de Islandia; la Medalla de la Academia Francesa; la Gran Cruz de la Orden de Santiago de la Espada en Portugal; la Orden de la Legión de Honor en Francia; la Cruz de la Orden de Alfonso en España, la Rosa de Oro del Novecento en Italia y fue nombrado Doctor Honoris Causa por las universidades de Colombia, Oxford, La Sorbona y Roma entre tantos reconocimientos.

Borges también brindó conferencias por todo el mundo, visitando Estados Unidos en varias oportunidades, Europa e Israel. Su primera visita al exterior como expositor la realizó en 1961 invitado por la Universidad de Texas para dar cursos y una serie de conferencias en universidades norteamericanas. A su vez visitó Inglaterra, Escocia, Francia, Suiza, España y Alemania presentándose en diversos ámbitos académicos. Es el autor argentino con más traducciones de sus obras. Su influencia literaria alcanzó la pantalla grande a través de Días de odio dirigida por Leopoldo Torre Nilsson, cuyo argumento se basa en el cuento Emma Zunz.

En el mes de noviembre de 1985 Jorge Luis Borges se trasladó a la ciudad de Ginebra (Suiza) acompañado por María Kodama para fijar su residencia. Allí falleció el 14 de junio de 1986.

A partir de 2012 por la Ley 26.754 el Congreso de la Nación estableció el 24 de agosto como el «Día del Lector, en conmemoración y homenaje al día del natalicio del escritor argentino Jorge Luis Borges».

16 de agosto de 1920: Nace el escritor estadounidense de origen alemán Charles Bukowski

Pocos escritores fueron tan desagradables o tan interesantes como Charles Bukowski. Escritor, poeta, alcohólico y mujeriego, fue la voz de un tipo de contracultura que terminó ganando la atención y el respeto del mainstream.

Bukowski nació el 16 de agosto de 1920 en Andernach, Alemania, hijo de un soldado germano-estadounidense y de una chica con la que había tenido una relación casual mientras estaba cumpliendo servicio. Se casaron un mes antes de que él naciera y pronto se trasladaron a Norteamérica, donde su hijo Heinrich Karl pasó a llamarse Henry Charles (y más tarde solamente Charles). Se establecieron finalmente en Los Ángeles, donde Bukowski pasó gran parte de su vida y lo que se convirtió en el telón de fondo de muchas de sus travesuras y sus aclamados escritos.

Aunque sus primeras publicaciones ya son bastante agresivas, no fue sino hasta más tarde, después de una década dedicada a la bebida, cuando las cosas empezaron a ponerse buenas para Bukowski, o más precisamente, malas para él, pero buenas para nosotros. Después de ocupar varios puestos de trabajo, como empleado en una fábrica de encurtidos, o como cartero para el Servicio Postal de los EE. UU. La bebida comenzó a atrapar a Bukowski. A los 35 años edad, fue hospitalizado por una úlcera sangrante.

Pero para un escritor como Charles Bukowski, la tragedia, la autodestrucción y el dolor fueron regalos inspiradores de los dioses de la creatividad. Poco después de salir del hospital, comenzó a escribir poesía. También comenzó a coleccionar esposas, comenzando con Barbara Frye, una poeta de Texas con la que accedió a casarse sin haberla conocido en persona. Se divorciaron tres años después. Bukowski continuó escribiendo y bebiendo.

En 1962, Bukowski quedó devastado por la pérdida de Jane Cooney Baker, quien murió repentinamente de una úlcera. Bukowski tomó su muerte con fuerza, basando gran parte de su poesía posterior en ella. Pero no pasó mucho tiempo antes de que el problemático escritor se hubiera mudado con otra mujer, la poeta Frances Smith. Su primera y única hija, Marina Louise Bukowski, nació el 7 de septiembre de 1964.

En 1967, Bukowski lanzó una columna en la publicación clandestina Open City, llamada “Escritos de un viejo indecente”, que luego fue recogida por Los Angeles Free Press y NOLA Express en Nueva Orleans. Pero no fue hasta sus 49 años que Bukowski finalmente abandonó la oficina de correos y se convirtió en escritor de tiempo completo. Completó su primera novela, titulada acertadamente, Cartero, una historia algo autobiográfica sobre Henry Chinaski, un empleado de correos que se convirtió en el alter ego literario de Bukowski. El libro fue publicado por Black Sparrow Press, una pequeña editorial independiente dirigida por John Martin. Martin creyó en Bukowski y le dio una chance mientras Hank aún era relativamente desconocido. Por aprecio y respeto, Bukowski continuó trabajando casi exclusivamente con Black Sparrow durante el resto de su carrera.

Famoso por sus descripciones crudas y su prosa sin filtro, las obras de Bukowski arrastran a sus lectores a la perspectiva de una botella vacía. Sus cuentos y poemas resaltan los aspectos ingratos, insignificantes y patéticos de la existencia humana. Sus personajes son asquerosos. Sus vidas son asquerosas. Todos están rotos y son defectuosos. El don de Bukowski consistió en mostrarnos qué tan malo todo podría ser.

Falleció el 9 de marzo de 1994 de leucemia.